1 ¿Cuales eran los aspectos más importantes para la Nueva España?
R: El económico, político y social.
2 ¿Cual era el porcentaje de la población en Nueva España?
R: Indígenas: 70%, criollos y españoles: 20% y mestizos y africanos: 10%.
3 ¿Que familias a lo largo del siglo XVIII incrementaron su riqueza y porque?
R: Las peninsulares y las criollas. Por sus actividades comerciales y mineras.
4 ¿Como crees que Nueva España sobrevivía a la crisis económica a lo largo del siglo XVII? R: Por cobros de impuestos cada vez mayor.
5 ¿Que significaban las ciudades para la Corona española?
R: Centros políticos, económicos y culturales.
6 ¿En el siglo XVIII que desarrollo la Nueva España para que hubiera mas ingresos en la economía? R: Una industria de telas de algodón, tabaco y cerámicas entre otras.
7 ¿Para el siglo XVIII cual era el centro de producción agrícola más importante de Nueva España? R: La región del Bajío.
8 ¿Quienes habían derrotado más de una vez a la fuerza naval de la Corona?
R: Francia, Holanda e Inglaterra.
9 ¿Bajo el reinado de quien España alcanzo sus peores momentos en la crisis económica?
R: El reinado de Carlos II, quien solo tenia 14 años en 1676.
10 ¿Quien proponía separar la Nueva España del dominio peninsular y darle vida al imperio Mexicano? R: El general realista Agustín de Iturbide.
Para 1700, Nueva España era un mosaico de regiones consolidadas en los aspectos económicos, políticos y sociales, las que en conjunto conformaban un virreinato diverso, lleno de matices sociales y culturales, con dinámicas económicas propias, donde la riqueza y la opulencia convivían codo a codo con la pobreza.
Aunque no se cuenta con cifras precisas, los estudiosos del tema calculan que en estos territorios habitaban cerca de tres millones de personas. Los indígenas representaban aproximadamente 70% de la población; los criollos y españoles, en conjunto, 20%; el 10% restante estaba conformado por mestizos y población de origen africano.
Los principales rubros de la actividad económica eran la minería, la agricultura y la ganadería. Cabe destacar que en las primeras décadas del siglo XVIII, las minas de la Nueva España producían casi la mitad (46%) de la plata a nivel mundial.
Entre las principales poblaciones del virreinato eran: las ciudades de México, puebla, Guadalajara y Valladolid.
También eran importantes centros comerciales y de producción manufacturera.
En este tema se hablara de cómo se consolido el virreinato de la Nueva España en el aspecto: económico, político y social.
En el aspecto económico, la Nueva España en su mayor apogeo tuvo una gran producción de plata como nunca se había visto.
Esta producción arranco en 1700 y, resolvió algunas crisis entre 1750 y 1770.
También durante el siglo XVIII se expandió la tierra donde cultivaban hacia el norte del virreinato, haciendo crecer las haciendas como la explotación minera.
En el apogeo de la Nueva España a lo largo del siglo XVIII permitió que peninsulares y criollos se hicieran más ricos, tanto en sus actividades comerciales como mineras.
Esto también hizo fortalecer a los mercados Internos.
En el aspecto político, se crearon nuevas divisiones territoriales, al extenderse la colonización española hacia la Alta California, Texas, y Nueva Santander.
Por otra parte la llegada del siglo XVIII trajo importantes cambios políticos al imperio español.
Este cambio produjo cambios sustanciales en la manera de gobernar los enormes territorios de la monarquía.
En la Nueva España, como en el resto de los reinos de la corona española, los centros políticos, económicos y culturales se concentraban en las ciudades.
Para el siglo XVIII existían en el virreinato diversos tipos de ciudades; unas eran más importantes que otras, dependiendo su poder económico y político.
Tal era el caso de las ciudades de México, puebla y Valladolid, eran las ciudades más importantes del virreinato, pues en ellas se ubican corporaciones muy poderosas como: ayuntamientos, obispos y cofradías, además de que eran grandes centros comerciales y manufactureros.
Para el siglo XVIII, la pujante económica novohispana propicio la consolidación de nuevos centros urbanos.
Hacia mediados del siglo XVIII, el norte de la Nueva España era una región lejana, desconocida y baldía.
Esta situación obligo a las autoridades virreinales a tomar medidas para establecer la presencia novohispana en estas distantes regiones.
El territorio de Texas se había empezado a colonizar desde finales del siglo XVII; sin embargo, con la fallida expulsión de los jesuitas de los reinos hispánicos en 1767, la misión pasó a manos de los religiosos dominicos, quienes no mostraron el mismo celo misionero de sus antecesores. La colonización de Alta California se realizo por esos mismos años.
Por otro lado Europa experimento una revolución política y cultura.
A lo largo del siglo, junto con los descubrimientos científicos surgió para descubrir los secretos de la naturaleza y la solución a los problemas sociales. Estos intelectuales, a los que se le llamo ilustrados, se reforzaron por reformar la sociedad mediante métodos científicos.
A pesar de las críticas a la sociedad de su tiempo, los ilustrados no solo eran optimistas, sino que estaban convencidos de que si se emprendían reformas profundas en la sociedad, esta marcharía hacia el progreso. Las ideas ilustradas fueron bien aceptadas en las cortes monárquicas europeas, y en España fueron los reyes Borbones los que las introdujeron a su sistema de gobierno.
El absolutismo ilustrado se caracterizo por reforzar el poder central del Estado, implantar reformas en la administración de los reinos, unificar legal y económicamente el territorio y promover reformas encaminadas a una mejor fiscalización y explotación de los recursos y productos del reino.
Con el advenimiento de los reyes Borbones al trono de España inicio un proceso de reformas en las instituciones gubernamentales y administrativas. En la segunda década del siglo XVIII se emprendió la reforma general del gobierno, encaminada a lograr una mayor eficacia administrativa y a comprometer a los funcionarios con su gestión gubernamental.
Las áreas de gobierno que más se reforzaron fueron la administración, la hacienda, el comercio y el ejército. Estas medidas anunciaron la llegada de un gobierno mas duro, diametralmente opuesto a las tradiciones pactistas y corporativas de los reyes Habsburgo.
Los Borbones decidieron terminar con esta situación. Para ello aplicaron diversas acciones proyectadas a mejorar y diversificar la producción agrícola, impulsar el comercio al interior del reino.
A lo largo de las transformaciones políticas y sociales, la corona proyecto reformar a su Iglesia en Nueva España. Como hemos visto, la Iglesia estaba integrada por dos grandes sectores: el primero: el clero regular y el segundo: el clero secular. Fue al clero secular a quien la corona decidió apoyar, pues desde siempre los obispos habían sido aliados de la corona y eran, de hecho, uno de los pilares del pode virreinal.
Para hacer más fuerte el poder y la influencia del clero secular era necesario quitarle privilegios al clero regular.
Todas estas reformas estuvieron encabezadas por el arzobispo de México, que era el máximo jerarca de la Iglesia novohispana.
Esta decisión, que podía verse como un arrebato del absolutismo, en realidad fue una acción más de las reformas eclesiásticas y políticas de la corona, pues los jesuitas, desde su fundación, a finales del siglo XVI, habían acumulado gran poder económico e influencia social y cultural.
El traslado de las instituciones educativas y científicas europeas a tierras novohispanas inicio desde el siglo XVI. Desde entonces se importaron modos de producir conocimientos al ambiente hispanoamericano, pero los letrados nacidos y avecindados en America no fueron meros receptores de la ciencia moderna, sino formaban parte de esta.
Sin duda, fue el establecimiento y funcionamiento del real seminario de minería, la institución más importante para el desarrollo científico y la modernización educativa de la Nueva España.
Estos conocimientos tenían una aplicación practica en la explotación de los recursos minerales, en la cartografía, así como en la construcción de edificios civiles y militares.
No debe sorprender que quienes dominaban los conocimientos científicos en el virreinato fueran a menudo antiguos y modernos al mismo tiempo, pues sus quehaceres fueron sucesivamente transformados por generaciones hasta convertirse en las disciplinas y profesiones propias de nuestros días.
Y para terminar una constante en la historia de México, desde la conquista española en el siglo XVI hasta nuestros días en los albures del siglo XXI, han sido las recurrentes sublevaciones rurales, protagonizadas por pueblos indígenas.
Durante los primeros momentos del dominio colonial se produjeron innumerables levantamientos en respuesta a las terribles condiciones de vida a las que se vieron sometidos los pueblos indígenas y los africanos traídos como esclavos.
En pocas palabras a lo largo de toda esta historia nos damos cuenta que el tema “Nueva España” se vio afectado de altas y bajas, recuperación económica: desde no tener nada, a ser el país más abundante en riquezas y en lo político, México fue sometido a muchas reformas hasta ser lo que hoy en día.
Con esto concluye el tema.
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